El lanzamiento anual de una de las franquicias más fructíferas de la industria ha llegado a convertirse en todo un acontecimiento que nadie en su sano juicio quiere perderse. Ya sea una entrega con el sello Modern Warfare o el de Black Ops, Activision siempre se asegura de que la salida al mercado de su juego estrella no pase desapercibido entre la prensa especializada. Para ello, ayer por la noche fuimos reunidos en la Nave de Motores del Metro de Madrid para probar el juego, disfrutar de actividades diversas, competir entre nosotros y por supuesto presenciar la cuenta atrás llegados a la medianoche que suponía el pistoletazo de salida al nuevo título de Treyarch.
Durante varias horas pudimos probar los primeros niveles de la campaña para un jugador, comenzando por una misión en la que tuvimos que enfrentarnos a toda una guerrilla africana decidida a hacerse con el control del territorio para más tarde rescatar a un viejo conocido de todo aquel que haya jugado a la primera entrega de Black Ops. También comprobamos lo potente que sigue siendo el multijugador, un años más simplemente insuperable en todos los aspectos para todos los amantes de los shooters, y por supuesto el modo zombies que ha sido ampliado y cuidado como nunca. Y es que si os parece que lo que os vais a encontrar en el disco son tres juegos en uno, pues no vais desencaminados.
En diversas carpas pudimos deleitarnos con diversas actividades, como por ejemplo probar nuestra flexibilidad esquivando unos lásers cruzados con mucha mala uva, tatuarnos con tinta el logo de Black Ops en el brazo, prestar nuestros movimientos para un vídeo donde nos atacaban diversos vehículos futuristas e incluso prestar nuestro rostro para obtener una versión personalizada de la portada del juego en forma de chapa. Ah, en el exterior también pudimos controlar un dron como los que salen en el juego, aunque no era nada fácil estabilizarlo en el aire y hacerlo pasar por un círculo utilizando el mando táctil. En la siguiente foto podéis ver al redactor de este blog intentando sin mucho éxito ejecutar las maniobras necesarias para despegar y hacerlo pasar por un aro. Está claro que hubiese necesitado el mando de la consola para hacerlo bien.
La presentación del juego corrió a cargo de la siempre animada Tania Llasera, que tuvo la oportunidad de entrevistar a dos profesionales que han trabajado en el desarrollo de Black Ops 2. El primero fue Chris Cowell, diseñador jefe de sonido en Treyarch que contó algunas cosas interesantes del desarrollo como que por ejemplo todos y cada uno de los sonidos que escuchamos, desde el agua fluyendo hasta una roca chocando con algo, fueron grabados utilizando estos mismos elementos para que este apartado fuese lo más fiel posible a la realidad.
El segundo fue Jordi Mollá, al que le han reservado todo un caramelo. El conocido actor presta su voz a Raúl Menéndez, el villano de la función (y muy bueno, por cierto) en lo que definió como una experiencia distinta y muy interesante. Aunque no quiso hacer demasiado hincapié en la para muchos es una nueva fusión entre el cine y los videojuegos, sí que comentó que en un principio le fue difícil encontrar el punto adecuado para el doblaje, sin ser ni demasiado exagerado ni demasiado neutro como si estuviese actuando en una película. También subrayó que su personaje no es el típico antagonista, sino que todo lo que hace se debe a unas vivencias y una filosofía propia.
La velada terminó con la entrega de premios a los ganadores de la competición por equipos en el juego online, que se llevaron un jugoso lote con la edición especial de Black Ops 2, un cofre en el que se incluye incluso un dron como los del juego.
Muy pronto tendréis publicado en Generación Gamer un análisis del juego con nuestras impresiones y una pequeña guía para completar las misiones de la mejor manera posible.
Me despido dando las gracias al equipo de Activision España por una invitación inolvidable. ¡Sois los mejores!
Más fotos del evento: