Esperando a que empezaran las series de verano decidí ver Vegas, que había pasado más bien desapercibida y tiene un buen cartel de actores para no hacerla caso. Esto es lo que me encontré. Cómo siempre Spoilers tras el salto

Vegas relata, o lo intenta, porque tras esta primera temporada la CBS no la ha renovado, cómo se creó la ciudad del juego. La llegada de los nuevo empresarios –mafiosos- al desierto de Nevada cambia la vida de los habitantes y rancheros de la zona.

Ralph Lamb, ex policía militar y ahora ranchero, es uno de los perjudicados. Los aviones que no paran de llegar asustan a su ganado y no hacen más que dificultar su trabajo. Cuando una chica aparece asesinada en medio del desierto el alcalde de Las Vegas acude a él para que lleve la investigación, pues el sheriff está desaparecido. Ralph ni corto ni perezoso recluta a su hermano y a su hijo para que le ayuden a resolver el caso. Y ya tenemos lazos familiares y trama personal, añádele a la ayudante del fiscal y ya hay interés amoroso.

Por otro lado tenemos a Vincent Savino un mafioso de Chicago que viene a dirigir un hotel y que parece estar involucrado en todos los líos de la ciudad. Desde el primer momento Ralph y Vinnie chocan. Y es que uno pretende mantener los valores y tradiciones de los cowboys y el otro llevar un negocio, aunque sea de forma poco legal, o sea nada legal.

‘Vegas’ acaba convirtiéndose en una serie policiaca pero dándole una vuelta más. Nos llevan a los años 60, nos cuentan cómo se fueron creando Las Vegas y lo que la introducción del juego hizo a las personas  que vivían allí, cómo cambió la vida a algunos para mejor y otros para peor. Y además une cowboys y mafiosos. Que es como juntar churras con merinas pero funciona.

Vegas es entretenida, tiene unos personajes duros y rudos como los cowboys,  que en cuanto ven a una  mujer guapa se derriten a y un mafioso al estilo Casino, con mucha pompa, mucha lengua, mucha presencia pero que al final es el chico de los recados, todo el mundo le lleva de un lado a otro y no le sale nada. ¿Cómo no te va a caer bien si es un pobre diablo?

La serie es entretenida, tiene su toque fantasma con un prota que haría las delicias de Horatio Cane, poniéndose delante de un cadillac y parándolo a base de disparar a las ruedas, una buena ambientación y un plantel de actores de renombre encabezado por Dennis Quaid y Michael Chiklis, quienes también ejercen de productores, Carrie-Anne Moss, que está igual de estupenda y más elegante y sofisticada que en Matrix, y Jason O’Mara, que el pobre no levanta cabeza, serie en la que sale, serie que cancelan, tendremos que ponerle en nuestra lista de actores gafes.

En definitiva que en los dos días que me vi Vegas pasé un buen rato y hasta me da cierta pena que no continue, la cogí cariño.