En la segunda temporada de The Newsroom, Aaron Sorkin ha querido demostrar que aún haciéndolo bien te puedes equivocar.
Will McAvoy y la redacción de News Night parecen perfectos pero no lo son, una noticia puede acabar con su credibilidad y sus carreras. Hablamos de la fragilidad del periodismo.
Es cierto que las series de Aaron Sorkin, en este caso The Newsroom, no refleja el periodismo real. Pero es que el guionista nunca ha dicho que sean un reflejo de la realidad. Al igual que El ala oeste de la Casa Blanca mostraba lo que debían ser los políticos, The Newsroom muestra lo que deberían ser los periodistas.
Las series de Aaron Sorkin pretenden inspirar, decir que podemos ser mejores, hacerlo mejor si nos decidimos, como decía Charlie Skinner en el mismo piloto de la serie. Desde el principio el guionista ya dejaba claro de qué iba a ir, qué iba a mostrar, y cuál iba a ser el modo.
Esta segunda temporada de The Newsroom nos enseña que incluso haciéndolo todo bien nos podemos equivocar. Los redactores de News Night no buscan tres fuentes directas si no doce, repasan una y otra vez los datos e informaciones, y buscan perspectivas y ángulos nuevos para rebatir lo encontrado. Aún así cometen un fallo. El periodismo y la credibilidad son frágiles, arduos y un error puede acabar con una carrera.
The Newsroom no eleva solo el periodismo también a las personas, sus personajes acaban haciendo lo correcto, ahí tenemos a la abogada que parece un demonio al principio pero solo lo hace para defenderles porque quiere que ganen, o a Leona Lessing que se niega a aceptar las dimisiones de Charlie, Will y Mac, y finalmente a Reese que hace lo noble cuando Leona le deja la decisión de aceptar las dimisiones de los periodistas.
El respaldo de la gente, la necesidad de gustar, no es simple vanidad de Will McAvoy. Necesita que le quieren, porque la gente que ha querido le ha traicionado al final. Como Mac años atrás. Will la quiere pero no puede perdonarla y para que su relación funcione debe hacerlo. Así Will se pasa la temporada en contradicción por querer a la productora pero ser incapaz de perdonarla, haciéndola daño. Mac es consciente del daño que le hizo, aunque no a propósito, y por eso acepta lo que le tira una y otra y otra vez. Al final del último episodio Will se da cuenta de esto y decide perdonarla y arreglar la situación. Puede que sea un poco cursi o precipitado, pero es televisión cualquier escena romántica va a ser cursi.
Al menos es mejor que la relación entre Maggie y Jim, quienes no deberían acabar juntos ya que como pareja romántica son insoportables, en general Maggie es un personaje que podía haber sido muy bueno y que duele cada vez que sale en pantalla, aunque la trama de África ha dado uno de los mejores episodios de la temporada. Mucho mejor están llevando la relación entre Don y Sloan, personajes y pareja que ganan puntos cada vez que aparecen.
La segunda entrega de The Newsroom es compleja. Tenemos una trama que sobrevuela toda la temporada pero también subtramas que dejan a medias como la de Neal y Occupy Wall Street, suponemos que para seguir tratándolas en la tercera temporada que consistirá en recuperar la confianza del público.
Hemos echado en falta episodios que hablaban de alguna noticia o evento como en la primera temporada, los ha habido, pero siempre intercalados entre las vidas personales de los personajes y la supernoticia falsa de Genoa, por lo que han brillado poco. Aún así mantiene el nivel de la primera temporada, a algunos incluso les ha gustado más, por eso de dar una lección de humildad a los prepotentes presentador, productores y redactores de News Night y las metafóricas disculpas de Aaron Sorkin a quien criticaban sus clases de periodismo y sus personajes condescendientes.
Nosotros por nuestra parte seguiremos defendiéndolas pues da gusto ver periodistas íntegros, snobs e inteligentísimos también, que sueltan discursos y diatribas improvisados sin titubear ni equivocarse de palabra, porque al fin y al cabo la ficción es una realidad utópica que nos inspira para hacerlo mejor.
Cuando todo el mundo puso a parir esta serie yo la defendí muchísimo. Aunque he de decir que a la gente le ha gustado más la 2 que la 1 y para mi al revés. Hay cosas que no, pero eché en falta como dices en el artículo, más noticias puntuales y no centrarse tanto en una única trama
Yo soy fan de las dos porque soy devota a Sorkin y casi todo lo que hace, pero a título personal me gusta tambien más la primera que la segunda, aunque la segunda también me ha encantado, más la segunda vez que la he visto cuando he comprobado lo complejo de toda la temporada. Y me pareció valiente por parte de los guionistas, productores y la cadena que eliminaran el episodio que ya habían grabado y empezaran de nuevo. Estoy deseando que empiece la tercera temporada. Solo me quedan unos cuantos meses por delante ;D