Esta noche Movistar Series estrena Better Call Saul, serie de Vince Gilligan y Peter Gould y spin off de su gran éxito Breaking Bad. Mañana se emitirá el segundo episodio, y los martes de cada semana los espectadores podrán ver un nuevo episodio hasta completar los 10 de la primera temporada.

Better Call Saul es uno de los estrenos más esperados de la temporada por venir de quién viene, por hablar del personajes que habla, el picapleitos de Breaking Bad, y por estar creada por quién esta creada. Pero ¿Le podrá interesar a alguien que no ha visto Breaking Bad? ¿Le gustará?

La respuesta es que sí. Se perderá guiños a la serie madre y a lo mejor tardará más en pillar ciertas cosas de la historia que los que ya han visto Breaking Bad cogerán desde el principio. Pero la serie, como unidad independiente se puede ver por cualquiera y entender, gustar y alucinar sin necesidad de haber visto la serie del profesor de química que cocina metaanfetaminas.

La calidad y personalidad de Gilligan planean durante todo el primer episodio, que gracias a Movistar series pudimos ver en exclusiva. La historia, bastante deprimente, podría competir con cualquier película independiente. Porque eso es, al fin y al cabo, Better Call Saul, una historia de autor, en la que éste o estos más bien, Vince Gilligan y Peter Gould, introducen aquello que les hace buenos y originales. Como momentos tan tensos y deprimentes pero contados de tal forma que aleja al espectador lo suficiente para que pueda reír por no llorar.

Better Call Saul nos presenta a Jimmy McGill un abogado casi arruinado que nada tiene que ver con el Saul Goodman que la gente conoce o habrá oído hablar. De hecho la serie permite conocer al famoso abogado de Heisenberg. Es en definitiva como Jimmy McGill se va convirtiendo en Saul Goodman. Dos personajes que nada tienen que ver, a excepción, quizá de su labia.

Jimmy es un pobre diablo que lucha por una causa perdida intentando ganar clientes y dinero, inventando triquiñuelas que no le salen bien pero que darán pie para que se vaya introduciendo en un mundo lucrativo a la vez que peligroso. Better Call Saul es un estudio en profundidad de este personaje imperfecto, perdedor y carismático.

Better Call Saul atrapa y gusta hayas o no hayas visto Breaking Bad, porque aunque parte de ella, y tiene algunas semejanzas no es Breaking Bad y no vive de ella. Creemos que la serie tiene suficiente coherencia y personalidad para valerse y bastarse por si misma. Y esperamos que sea así.