Downton Abbey se despide con más de ocho millones de espectadores

Cuidado con los spoilers

¡Que se nos ha acabado Downton Abbey! Y con la serie se van las conversaciones en la cocina de Miss Patmore, los tés en la sala de la chimenea, las respuestas irónicas (y muchas veces crueles) de Lady Mary, la maravillosa Condesa Viuda y los ojos en blanco de Tom Branson cuando los Crawley eran demasiado.. demasiado Crawley. El elegante y aclamado culebrón de época estrenado en septiembre de 2010, se ha terminado tras seis temporadas y 53 capítulos. Por supuesto el telón ha caído con final feliz, con nuevo bodorrio para Lady Mary y un récord de audiencia

El capítulo de cierre ha tenido la friolera de 9,5 millones de espectadores en el Reino Unido. La serie de la ITV, la primera televisión privada inglesa, se ha emitido en varios países, entre ellos España y es adorada también por los estadounidenses. Para que el síndrome de abstinencia de los enredos inagotables de los Crawley no se nos haga tan duro han anunciado un especial navideño para el próximo 25 de diciembre y la posibilidad de un largometraje en el futuro. Así así se nos pasa el mono de lujo, bondad y decadencia que eran los habitantes de Downton.

Porque la serie de Julian Fellowes te puede gustar más o menos, te puedes creer o no esa especie de convivencia armónica, de simbiosis entre criados y señores, pero lo cierto es que se retira con las vitrinas atiborradas de premios Emmy y Globos de Oro y dejando muy buen sabor de boca. Porque hacer buenos culebrones es complicado, hacerlos elegantes todavía más.

El padre de Downton cree que la serie deja una lección: “Hasta hace muy poco, más o menos lo que ha sido mi vida adulta, las restricciones de la libertad de las mujeres eran muy severas, incluso en los países democráticos y especialmente en las clases medias y altas”. Las hermanas Crawley se encargaban de romper esos moldes. Hasta que llegó el “happy end” y nos las casaron claro, pero de eso pecan hasta los mejores.