Después de Perdidos, Damon Lindelof se alió con Peter Berg (Friday Night Lights) y Tom Perrota para crear esta ida de olla maravillosa basada en el libro de este último. Se sumaron para llevar The Leftovers a la pantalla Mimi Leder en la dirección y Max Richter en la banda sonora. A ellos se unieron actores de la talla de Justin Theroux, Amy Brenneman, Christopher Eccleston, Regina King y Liv Tyler para dar vida a los personajes.
Un suceso inexplicable y trágico. Nadie sabe por qué ha ocurrido, nadie sabe cómo entenderlo, cómo procesarlo y superarlo. Algunos intentan olvidar, otros fuman para recordar. Ya nada tiene sentido, el mundo está patas arriba, dolorido y sin saber qué hacer.
Los personajes de The Leftovers están perdidos, se agarran a lo que pueden para conseguir algo de seguridad, de cordura. Algunos se sumergen en la fe, en la esperanza. Cosa de la que farsantes pueden aprovecharse. Otros creen que tienen la razón y la defienden hasta sus últimas consecuencias. Y la mayoría intenta superarlo como puede, día a día. Apoyándose en amigos, familia y vecinos.
The Leftovers es una locura de serie, se les va la olla un montón y al mismo tiempo es enorme y filosófica y refleja al ser humano de manera maravillosa. Esa necesidad de comprender, de tener amor, de tener seguridad. La situación ocurrida, el ascenso, las desapariciones les sobrepasa.
La soledad, el abandono, la culpa, el miedo, tener la sensación de que estas perdiendo la cabeza entran en juego. The Leftovers explora todos estos sentimientos con simbolismo, con situaciones que pueden alejar al espectador, pero perfectamente equilibradas para traerle de vuelta de ese gran “WTF?” y que se enganche y no pueda dejar de pensar en lo que está viendo y ha visto y descubra lo brillante del guión, de la historia y de la serie.
Debo confesar que no soy muy fan de Damon Lindelof, (no me ataquéis aún hordas de seguidores de Perdidos), pero el guionista es muy bueno. La suerte es que HBO le ha dejado hacer lo que ha querido y se nota. Una serie como The Leftovers no puede estar sujeta a restricciones creativas porque es una locura de serie con cierto sentido, pero para explorarlo tienes que dejar libre al creador.
Los actores están increíbles, empezando por Justin Theroux y terminando con Regina King, pasando por Liv Tyler, Christopher Eccleston y Amy Brenneman, Ann Dowd y Carrie Coon. Muestran como nadie lo que quiere reflejar la serie, la fragilidad, la fortaleza, el miedo, la duda, la bondad, la culpa, la locura. Crean unos personajes carismáticos que nos enamoran, hacen que nos caigan bien e incluso que comprendamos sus acciones más locas. Para ello es también fundamental los episodios céntricos, en los que vemos los puntos de vista de los protagonistas. De donde vienen, qué les ha ocurrido, sus razones, motivaciones y emociones por las que han pasado que les hacen estar donde están ahora.
A ello se suma una dirección fantástica de acciones y reacciones, de detalles, de simbolismos, que nos mete de lleno en el mundo de The Leftovers. La conocida Mimi Leder, que también ejerce de productora, está a la cabeza de los directores que llevan a la pantalla la visión de Damon Lindelof y Tom Perrota. Completa la serie una banda sonora excelente que complementa perfectamente la historia y los personajes con canciones para cada uno de los protagonistas como el ‘where is my mind‘ de los Pixies para Kevin Garvey. Y con la música creada por Max Richter para ponernos en el ambiente y terminar de hacer redonda The Leftovers.
3 comentarios