Llega un momento en toda relación con una serie en el que alguien lo tiene que dejar. Es un momento confuso porqué ¿Quién empezó? ¿Fue el guionista que se cargó tu personaje favorito? ¿O fuiste tú que ya no le ponías tantas ganas a la serie? El caso es que poco a poco os vais separando, ya no os hacen gracia los mismo chistes, no tenéis nada que contaros y tenéis que romper. Es lo que me ha pasado con The Mindy Project.
Cuando The Mindy Project y yo comenzamos nuestra relación todo fueron risas, hubo sorpresas (en realidad Mindy Kaling mola), regalos en forma de detalles (hola actores invitados y cast en general), momentos tiernos que nos hicieron llorar y abrazarnos (¡en realidad Danny Castellano es adorable!).
El comienzo de la relación de Mindy y Danny coincidió con el momento en que la serie y yo dejamos de tontear y empezamos a ir en serio. Tuvimos nuestras primeras broncas también, porque qué motivo más tonto el que Danny no quiera tener una relación con Mindy. Y nos reconciliamos como los dos doctores de la serie.
Pasamos por momentos difíciles: los meses sin vernos por las vacaciones, nuestros horarios y agendas, también tenemos que ver a otros amigos, y que cada otoño, inviernos y verano aparecían nuevos pretendientes que me tiraban los tejos. Pero seguíamos fieles la una con la otra.
La vida tiene estas cosas, te vas con nuevos amigos (Hulu) piensas que ya no tienes nada que contar y cambias por completo. La relación se va desgastando, ya no te veo tan a menudo, tal vez, porque haces cosas que no me gustan, como volver a exagerar los rasgos más retrógrados de mi personaje favorito, que habías suavizado para hacerle carismático, o hacer que la protagonista, independiente, feminista y segura, de repente haga cosas tan fuera de ella como sacrificar su carrera por un hombre. Mindy quiere un hombre pero ya ha aprendido a no sacrificar sus intereses, profesión y vida por alguien. Así que cuando se da cuenta de eso me dejas con un final de mitad de temporada triste, porque vas a separar a mis personajes. Cuando volvemos a vernos, después de habernos dado un tiempo, no lo mejoras, es como que estas cabreada con mi personaje favorito, Danny Castellano, y le castigas convirtiéndole en algo que no es ¡Y me pones a otro tío para suplantarle!
Así que me cabreo y me doy cuenta que ya no tenemos nada en común, que ya no me haces reír, que tus tramas no me interesan y que verte me desespera. The Mindy Project has cambiado y lo tenemos que dejar con la última temporada a medias.