Hace algunos días publicamos nuestra lista de las principales decepciones que se han sucedido a lo largo del año que está a punto de finalizar, sin embargo no nos gustaría despedirlo de manera tan negativa y sin darle el debido valor a aquellos eventos que sí nos han ilusionado y nos han hecho pasar tan buenos momentos. A continuación os dejamos los que a nuestro juicio han sido los más destacados.
The Last Guardian, la resurrección del ave Fénix
Parece mentira pero la nueva obra de Fumito Ueda ya está en las estanterías de las tiendas. Lo consideramos toda una suerte, pues pocos proyectos en el seno de Sony han sufrido un desarrollo tan complicado como The Last Guardian, un juego en el que Japan Studio llevaba trabajando activamente desde 2007.
Se concibió para convertirse en uno de los grandes títulos exclusivos del catálogo de PlayStation 3, pero al parecer las limitaciones técnicas de la plataforma y las dificultades a las que se enfrentó el equipo para trasladar al juego las ideas de su principal diseñador retrasaron su lanzamiento que finalmente se ha producido en 2016 y para PlayStation 4.
Desde luego, hubiese sido una lástima que en el proceso hubiese sido cancelado como tantas veces se rumoreó. La aventura de este niño junto a su amigo Trico está cargada de emoción y momentos épicos. Un título de gran personalidad, que nos sumerge en un mundo de fantasía realmente fascinante, como sólo Ueda es capaz de ofrecernos y en el que tendremos una constante –y maravillosa- sensación de déjà vu respecto a sus anteriores trabajos, Shadow of the Colossus y muy especialmente ICO. Por supuesto no es perfecto, pero si lo pensáis bien los juegos verdaderamente memorables nunca suelen serlo.
Nintendo Switch, un todo en uno muy esperanzador
Más allá de que todavía no se conocen todas sus especificaciones técnicas, de que su anuncio provocó una severa caída de las acciones de Nintendo y en definitiva de que seguimos a la espera de que la compañía haga una presentación formal, nosotros queremos dar a Switch un voto de confianza especialmente por lo interesante de su propuesta.
La sucesora de Wii U, que va a finalizar su recorrido comercial muy por debajo de las expectativas, es una consola híbrida adaptada para su uso doméstico y también como portátil a modo de tableta. Además apuesta claramente por el juego cooperativo haciendo gala de un diseño muy particular de sus mandos que se dividen para poder ser utilizados por varios jugadores en una misma partida.
En enero tendremos mucha más información al respecto, pero lo que sí está claro es que sus prestaciones la situarán en la órbita de sus principales competidoras y que contará con títulos exclusivos muy atractivos, como un nuevo Mario o el deseado por muchos The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Si además las third parties devuelven su apoyo a Nintendo tal y como están proclamando, nos encontramos ante una apuesta muy firme que definirá en gran medida el futuro del gigante nipón junto a su entrada en el mercado móvil. Sólo faltan tres meses para que esté entre nosotros.
Primeros detalles de Nintendo Switch, antes conocida como NX
Doom, los viejos rockeros nunca mueren
Cuando los padres de la criatura se dieron cuenta del camino que estaba tomando el desarrollo de Doom 4, al que internamente llamaban de manera burlona Call of Doom por sus continuos scripts y el planteamiento de sus escenarios muy en la línea de la franquicia de Activision, decidieron hacer borrón y cuenta nueva. Estaban convencidos de que un título de esas características no respetaba el legado de la veterana saga y que no iba a ser lo que los fans esperaban jugar.
El tiempo parece haberles dado la razón, porque el nuevo Doom vuelve a los orígenes con una apuesta sin complejos por la acción pura y dura donde los demonios y las bases espaciales vuelven a ser una constante. Una experiencia brutal, desafiante y adrenalítica para los amantes de lo old school y de desparramar vísceras.
Lástima que su apartado multijugador no dejase tan buenas sensaciones como su campaña para un jugador, pero ya se sabe que los viejos rockeros no cambiarán nunca. Hay que dejarles hacer lo que mejor saben, y precisamente por eso seguimos disfrutando de ellos como el primer día.
Uncharted 4, una despedida más que dudosa pero por todo lo alto
No nos lo acabamos de creer, sobre todo a juzgar por las espectaculares ventas y excelentes valoraciones del último título de Naughty Dog protagonizado por Nathan Drake, pero según el estudio californiano el carismático aventurero se ha retirado oficialmente.
Suspicacias aparte, si así ha sido no podía haberlo hecho de mejor manera. Uncharted 4 ha sido puro espectáculo, uno como nunca antes habíamos disfrutado en consola y además aderezado con una historia de piratas entre lo moderno y lo clásico que es desarrollada con más tranquilidad y esmero de lo habitual.
La verticalidad de los combates, la extensión de sus escenarios, la perfecta mezcla de acción trepidante y plataformeo, pura diversión que se apoya en un apartado técnico y artístico simplemente brillante. Algunos siguen prefiriendo la segunda entrega de la saga, otros argumentan que ha perdido capacidad de sorpresa, pero a día de hoy todos convendrán que Uncharted 4 es todo un referente en el catálogo de PlayStation 4 y en su género.
Análisis completo de Uncharted 4, el título al que siempre soñamos jugar
Overwatch, ha nacido una estrella
A veces para triunfar no es necesario arriesgar más de la cuenta, sino simplemente conocer a tu público, saber qué es exactamente lo que busca y dárselo multiplicado por cinco. Esta es más o menos la filosofía que ha seguido Blizzard a la hora de crear Overwatch, que sin prometer más de lo que podía asumir y haciendo únicamente el ruido justo y necesario se ha metido a los jugadores en el bolsillo convirtiéndose en el nuevo referente de los eSports y en el juego del año de la gala de The Game Awards.
Adictivo, versátil, muy competitivo y con un estilo muy desenfadado, esta mezcla de MOBA con shooter multijugador ha logrado adquirir una gran popularidad en tiempo récord.
Motivado por su creciente éxito, el apoyo del estudio a su producto es total con un continuo goteo de actualizaciones, por lo que se le augura una larga vida.
La fiebre Pokémon que disparó la temperatura
Aunque poco a poco parece que va remitiendo, la locura generada por Pokémon Go no sólo ha sido uno de los fenómenos más destacados de este 2016 en el mundo de los videojuegos, sino de la actualidad en general.
Una vez la app estuvo disponible para su descarga y de manera gratuita, pues apostaba por un modelo de negocio basado en los micropagos, su éxito fue prácticamente instantáneo. El resultado, que durante los meses de julio y agosto los medios se llenaron de noticias cada vez más rocambolescas sobre las peripecias de todos esos aspirantes a entrenadores de Pokémon que se plantaban en mitad de una autopista para realizar una captura, que asaltaban propiedades ajenas aun a riesgo de recibir un disparo siguiendo las huellas de alguna criatura particularmente extraña o que intentaban hacer negocio ofreciéndose a tomar prestado cualquier Smartphone ajeno para aumentar la colección del interesado aprovechando que habitualmente se veían obligados a recorrer grandes distancias a pie. Noticias curiosas, a veces muy divertidas y en ocasiones realmente trágicas que en su mayoría seguro que todos recordamos.
Claro que el nuevo despertar de la pokemanía no se ha limitado a GO ni mucho menos. El lanzamiento de Pokémon Sol y Luna también tiene buena culpa de que la franquicia nipona se haya revitalizado, por lo que estamos seguros de que en los próximos meses a los fans les aguardan muchas sorpresas.
Nintendo Classic, el Santo Grial más deseado
Los lanzamientos de PlayStation 4 Pro y de Xbox One S, los anuncios de Xbox Scorpio y Nintendo Switch, los dispositivos de realidad virtual… las grandes compañías se están esforzando por sacar músculo presentando lo último en tecnología punta al servicio del entretenimiento. Pero, ¿y si os dijésemos que la consola por la que medio mundo ha suspirado este 2016 se lanzó en 1985?
Lo cierto es que esto no es del todo exacto, pues la mítica videoconsola de 8 bits ha sido convenientemente reeditada en una versión mini que puede conectarse a los nuevos televisores por microUSB o HDMI. Y aunque no permite introducir los cartuchos originales, su aspecto coincide a la perfección con el de la vieja NES y trae preinstalados una treintena de juegos tan míticos como Donkey Kong, Castlevania o Metroid.
Un capricho irresistible que como os podréis imaginar supone un regalo estrella de cara a las navidades. Sin embargo, ni siquiera Nintendo pudo anticipar un éxito semejante, por lo que no tardaron en darse cuenta de que el número de unidades disponibles sería incapaz de satisfacer la desmesurada demanda. Por esta razón, Nintendo Classic Mini es un producto hoy por hoy considerado todo un lujo, un caramelo para los coleccionistas que a buen seguro propiciará que en un futuro veamos otras revisiones similares. Ya se rumorea la de Super Nintendo…
Ha habido mucho más, y sentimos que nos dejamos en el tintero cosas como la emoción mundial al conocerse que títulos como The Last of Us 2 o Red Dead Redemption 2 ya se encuentran en desarrollo. O que Resident Evil 7 por fin vuelve a sumergirse en el género del terror, esta vez optando por la perspectiva en primera persona, para satisfacción de los aficionados que nunca vieron con buenos ojos el giro de la saga que vio incrementada su dosis de acción en contra de la propia esencia de la franquicia. Pero todo esto preferimos dejarlo para un próximo reportaje sobre lo más esperado de 2017, y es que el nuevo año se presenta muy fuerte, por lo que hay motivos para pensar que nos dará muchas alegrías.
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