Aunque la despedida de Carlos y Karina ha sido dura, era inevitable. Y es que los seguidores de la serie no solo dijeron adiós al personaje protagonista al que han visto crecer durante estos últimos 17 años, sino también al actor que le ha dado vida, Ricardo Gómez, que ya era casi como de la familia tras tantas temporadas.
Como quien avisa no es traidor ya nos lo habían dicho, las lágrimas eran inevitables en un capítulo que muchos han considerado el mejor final para la serie. Y desde luego cumplieron con su palabra, los más de dos millones y medio de espectadores que ayer vieron el último capítulo de temporada lloraron, vaya si lloraron. Sobre todo en las redes sociales.