SKAM en noruego significa “vergüenza” y precisamente de eso trataba la serie original que contaba la vida cotidiana de los adolescentes en Hartvig Nissen, una escuela en el rico distrito de Frogner en el West End de Oslo. La serie se convirtió en todo un gran éxito y los remakes no tardaron en llegar: Francia, Alemania, Italia…y, por supuesto España.

Todas estas versiones han seguido el esquema de la original para estructurar las temporadas. Cada temporada se centra en un personaje distinto, en una “vergüenza” distinta. En la versión española la primera temporada giró en torno a la figura de Eva que debido al bullying se veía obligada a rehacer su red de amistades y se enfrentaba a ese tipo de soledad que resulta tan paralizante para un adolescente. Esta segunda temporada, en la alejándose que se original para mantenerse fieles, el personaje elegido ha sido Cris, que ha dado a los fans más acérrimos de los remakes lo que estaban pidiendo a gritos: una versión femenina de Isak (o Evan, depende de a quién preguntes) para un viaje de aceptación y de encuentro con el verdadero yo y – por qué no- con el primer amor.

Cris, la protagonista de esta segunda tanda de episodios, ha sido hasta ahora la fiestera del grupo. Y es un auténtico placer ver como poco a poco va aprendiendo no sólo sobre cómo se siente sobre Joana – la misteriosa chica nueva- sino en cómo gestionar todas sus otras relaciones. La vemos mucho más retraída de lo que parece a primera vista, protegiendo sus inseguridades con una fachada de despreocupación que hace más por aislarla de sus amigas que por facilitar que pueda navegar por todas estas experiencias nuevas sin verse superada por las circunstancias.

El objetivo principal de SKAM ya sea en España, en Italia o en Estados Unidos es que nos sintamos como si tuviéramos asientos de primera fila en la vida de estos adolescentes (Eva, Viri, Cris, Nora, Lucas y Amira). Y os voy a decir una cosa, quitando las licencias propias que debe tomarse cualquier serie en aras de un buen trabajo narrativo – la serie consigue con creces su objetivo. Sus episodios que se ven los domingos en Movistar+ están formados por diversos clips que se han visto a lo largo de la semana en momentos «aleatorios» del día. Es la vida en directo.. y un desgaste absoluto de la tecla F5 para los seguidores más irredentos. Es decir, que si un clip se emite el sábado a las  21:16, estamos viendo lo que pasa en ese mismo momento en casa de Cris.

Estos clips y todas las actualizaciones de los protagonistas en redes sociales los podemos ver gratuitamente en la web oficial de SKAM España y en sus respectivos perfiles, completando la sensación de inmersión. Admitámoslo, no hay nada más placentero para ese adolescente cotilla que todos llevamos dentro que saber que dos de los protagonistas han tenido una discusión en el clip e ir corriendo a ver la actualización pasivo agresiva de uno uno de ellos en redes; o que hayan tenido un momento tierno y se manden un mensaje subliminal a través de instagram.

Lo que sí os vamos a decir es que si entráis en el mundo SKAM lo más probable es que acabe dominando vuestra vida televisiva. Porque es todo muy fuerte, tía.