Después de la muerte – cancelación – sufrida este verano de la mano de FOX. El Rey del Infierno – la serie Lucifer – ha resucitado – salvado de la cancelación – por Netflix para traernos su cuarta temporada y dar cierta resolución al cliffhanger con el que pretendían dejarnos en la tercera.
Así que Lucifer ha encontrado nueva casa en la que esperemos se quede mucho tiempo, o al menos una temporada más, y nos den respuestas sobre esta cuarta temporada que vamos a pasar a comentar, sí, con spoilers.
Lucifer ha vuelto con menos episodios, ahora son 10, antes eran 22, eso sí, un poquito más largos, de unos 50 minutos. También ahora la serie del ángel caído reconvertido en detective ha aprovechado su nuevo hogar para ser más explícita y mostrar más. Había que aprovechar el duro entrenamiento al que se ha sometido Tom Ellis durante el verano y enseñar su cuerpo musculado, 🤔 o se ha sometido tal entrenamiento porque tenía que estar musculado. Sea como sea está estupendo, y para muestra el tráiler de Netflix.
La serie no ha perdido su toque, ni su estilo solo porque haya cambiado de forma de emisión, sigue manteniendo su humor, su drama, y su misterio, cada vez más sobrenatural y fantástico, recordemos que Lucifer está basada en un cómic de Neil Gaiman. Lo que se le ha añadido es esa libertad para ser más explícita mostrando cuerpos desnudos e incluso un poquito más violenta que antes.
Pero vayamos al lío. Como recordamos la temporada anterior terminó con Lucifer sacando sus alas para salvar a la detective Chloe Decker y por fin esta descubriendo la verdad, o dándose cuenta de la verdad, cara de diablo incluida, lo cual la ha dejado un poco trastornada.
En esta temporada la detective ha tenido que lidiar con sus miedos y aceptar a Lucifer cómo realmente es. La duda ha sido una constante esta cuarta temporada en la vida de Chloe, aliándose con un cura no tan bueno como pudiera parecer, y haciendo algún que otro feo a Lucifer. Por un lado está la profecía, la cara, lo que la historia y el mundo entero ha dicho de Lucifer, de el Diablo,y por otro el hombre que conoce, con el que ha trabajado y al que parecía que había llegado a querer o algo por el estilo.
Tampoco ha sido una temporada fácil para Dan, tras la muerte de Charlotte ha recorrido un viaje oscuro de perdición y culpa. Puede que sus actos hayan sorprendido a la audiencia volviendo a ser el Dan de las primeras temporadas, más oscuro y corrupto. Ella por su parte ha tenido una relación difícil con el de arriba, el viaje de aceptación sobre la pérdida de fe y recuperación de esta ha sido importante para la científica forense, tener fe no significa que todo va a ser un paseo.
¡Linda y Amenediel van a ser padres! ¿Tendrá alas el bebé? ¿dónde lo criarán? ¿serán buenos padres? ¿A qué peligros se enfrentará? Linda es uno de los personajes más cuerdos de la serie, si no el más cuerdo y se le somete a circunstancias muy especiales que tiene que aceptar rápidamente porque los que están a su lado son incapaces de aceptarlas. Es la conciencia del resto de personajes, fuerte y sensato, pero no me importaría que la ayudaran un poco más.
Otro personajes que lo pasa muy mal y cuyas circunstancias son bastantes crueles es Mazekin, es un demonio fiel a Lucifer, quien la ha usado y pasado de ella en más de una ocasión, aunque se haya dado cuenta de sus errores; su madre la abandonó al nacer, se enamoró de un ángel que se enamoró de su mejor amiga, parece que a veces sobra, y para terminar esta temporada le han roto el corazón. Pero no importa, porque ella siempre vuelve con la cabeza levantada. Es un demonio cada vez más humano y al que se le quiere por su lealtad, su vulnerabilidad, pero ¡joe! Que le den alguna historia bonita de vez en cuando.
Si todo esto no era suficiente Lucifer ha tenido que lidiar con el despecho de la detective y encima ha venido su ex, y además trae con ella una profecía nada buena: “Cuando Lucifer y su primer amor se encuentren se desatará el infierno en La Tierra.”
La llegada de Eva pone las cosas difíciles para Decker y Lucifer. Lucifer hace lo que hace siempre, ocultar su dolor a base de sexo, drogas y alcohol con Eva, que lo que quiere es irse de fiesta y volver con Lucifer. El personaje es gracioso, pero cansino, llega un momento en los episodios de la temporada que te saca de quicio.
El viaje de autodescubrimiento de Lucifer continua, como se siente culpable y se odia se ve como un monstruo y lo muestra. En esta temporada Lucifer ha tenido esa lucha interna entre nuestras peor y mejor partes. Solo que él es El Rey del Infierno, El Diablo, por lo que encontrar el equilibrio es más difícil si cabe para él, sobre todo después de ver que la mujer a la que ama le cuesta aceptar esa otra parte más oscura de su personalidad.
Como vemos la aceptación ha sido el tema clave de esta temporada de Lucifer. Aceptación de la fe, la identidad, tu opinión, la marcha de un ser querido, el amor no correspondido, la responsabilidad de criar un hijo…y los sacrificios que esta aceptación conlleva: el dejar de mirarse el ombligo y hacer lo mejor para el bien común, o para la persona que quieres, o para un amigo, o para uno mismo.
Al haber menos episodios en esta cuarta temporada de Lucifer en cada uno de ellos se han tratado los dilemas de los personajes sin dejar de investigar los casos más variopintos y extraños, de los que, por supuesto alguien sacaba o intentaba sacar algo en referencia a su vida personal, casi siempre Lucifer. Aunque ha habido de todo, tal vez porque tenía muchas ganas, la temporada me ha parecido un poco sosilla. Puede que sea porque Eva me cansaba, o porque quiero que estén juntos Chloe y Lucifer de una vez, o porque tengo la sensación de que la temporada pasada fue muy intensa, en especial los últimos episodios, y no la he vivido de igual manera.
Ahora, me lo he pasado muy bien viendo esta cuarta temporada, me he reído, me he alegrado la vista, he sufrido y querido abrazar a los personajes, y los últimos episodios han sido trepidantes. Por no decir nada de ese final y esa última escena, brutal.
Estoy muy de acuerdo con todo!! Pero la estoy volviendo a ver porque es realmente divertida y al perder la ansiedad se disfrutan otros detalles.
Como reflexión final, los humanos somos tan jodidos que estamos jodiendo al mismísimo Lucifer!!! 🤣🤣🤣. Se tenía que decir y se dijo, el era un diablo muy feliz antes de involucrarse con humanos