Las mejores series de 2021

Desde detectives en pueblos golpeados por la desgracia, hasta escritoras del siglo XIX con un exceso de imaginación (y sentimientos). Este año nos ha traído de todo, televisivamente hablando. Ha llegado el momento de echar la vista atrás y ver cuáles han sido las mejores series de 2021.

Mare of Eastown

Gracias a los dioses de la televisión por Kate Winslet. Lo que parecía una serie más sobre un asesinato en un pueblo pequeño se convirtió enseguida en una de las series más disfrutables del año. ¿Una de sus grandes virtudes? Tomarse su tiempo para construir personajes en medio de narrativas con tempos cada vez más frenéticos. Para presentar un mundo rico en matices, pero sin ser innecesariamente complicado. Winslet y Evan Peters se encargan del resto.

WandaVision (Bruja Escarlata y Visión)

Marvel comenzaba la fase cuatro con una carta de amor al mundo de las sitcom. De paso, tuvieron a medio internet teorizando semana a semana sobre qué diantres pasaba con Westview. Bruja Escarlata y Visión supuso una forma diferente de aproximarse al Universo Marvel, dejando por un momento las explosiones en un segundo plano para poner en el centro el duelo de los personajes.

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Ted Lasso

El buenazo de Ted repite en la lista de las mejores series del año. Esta segunda temporada no renuncia a la intrínseca bondad de los personajes. Eso sí, se centra en enseñarnos que las buenas personas también tienen sus capas, sus fallos y complejidades. Y aunque lo emitieran en verano, tiene uno de los mejores episodios navideños que hemos visto. Porque la segunda temporada de Ted Lasso se siente como un abrazo después de un día muy largo.

Mythic Quest

El equipo de Mythic Quest ya nos regaló una preciada sonrisa en los duros tiempos del confinamiento. En 2021 han repetido hazaña con una temporada que no perdía el pulso con el humor, pero que indagaba mucho más en los miedos y sentimientos de sus protagonistas. De paso, nos regaló Everlight y los episodios sobre el pasado de Murray Abraham que son una auténtica delicia televisiva.

El juego del calamar

El juego del calamar, con todas sus virtudes y con sus defectos, ha sido sin duda alguna el fenómeno del año en el panorama seriéfilo. Una crítica feroz al capitalismo que llegaba en un momento en el que la sociedad estaba harta y cansada de todo. El juego del calamar tuvo tanto éxito en parte por llegar en el momento adecuado. pero eso no le quita ningún mérito porque no es ni mucho menos lo único que tenía que ofrecer. ¿La fórmula ganadora? Mucho de Battle Royale y ningún miedo a escribir personajes desesperados, despreciables pero muy humanos. Completa el asunto una estética muy propia, mezcla de lo infantil y lo siniestro.

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Solo asesinatos en el edificio

Oliver (Short), Charles (Martin) y Mabel (Gomez) son tres vecinos de un lujoso complejo de Manhattan, el Arconia, que solo se conocen de cruzarse de cuando en cuando en el ascensor. Al menos hasta que uno de sus vecinos muere en extrañas circunstancias y deciden investigar por su cuenta el caso. Y montarse un podcast. La serie de Star+ está magníficamente escrita y maneja a la perfección los recursos tanto de la comedia como del género policiaco. El trío protagonista funciona como un reloj, complementándose de tal forma que todo parece salir sin esfuerzo aparente. En una palabra: indispensable.

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Dickinson

Apple TV está construyendo poco a poco un catálogo más que solvente. Uno de los tesoros escondidos en él es la divertida y original Dickinson. Esta peculiar visión sobre la vida de una de las más grandes escritoras norteamericanas llega a su fin este año con su tercera temporada. Una tanda de episodios que ha llegado cargada de diversión, anacronismos, guiones rápidos y originales con un reparto en estado de gracia. La serie protagonizada por Hailee Steinfeld es un soplo de aire fresco y todo un regalo para los amantes de la literatura.

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Fantasmas

Dentro del maravilloso (aunque todavía no oficial) género “seres sobrenaturales compartiendo piso”, esta producción británica brilla por méritos propios. Tres temporadas hilarantes (la tercera llegó a Movistar+ justo a tiempo para Halloween), con una premisa muy simple: una joven pareja se muda a una mansión en la que conviven con unos peculiares fantasmas.

Arcane

Aunque no tengas ningún interés en el mundo de League of Legends. Arcane es la serie que ha llegado para dejar claro que las ficciones basadas en un videojuego no tienen que orientarse solo para los fans. Una auténtica maravilla a nivel de animación, unos personajes carismáticos junto a un guion emotivo y maduro con un fuerte sentido de la narrativa. ¿Qué más se puede pedir?

Maricón Perdido

Una apuesta de autoficción muy personal. Irregular en muchos aspectos sí, pero extremadamente coherente y disfrutable. Bob Pop juega con sus recuerdos, con los setenta y los ochenta, con sus ilusiones y aspiraciones. Un relato que funciona a través de fragmentos y de saltos temporales. Imperfecto, pero cargado de emoción y de intención.

Venga Juan

Juan Carrasco es un desastre político, pero no hace más que darnos alegrías televisivas. En esta tercera temporada parece que las consecuencias de todo lo que ha hecho hasta ahora le van a pasar factura de golpe. Una serie donde la metaficción ha alcanzado cotas increíbles con un Javier Cámara en plena forma.

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