Touch juega con los seis grados de separación, con el universo, los números y patrones, con la bondad del extraño, y con la necesidad más humana: la de comunicarnos y conectar.

Una sensación agradable y optimista es lo que deja esta serie en la que un padre se comunica con su hijo autista a través de números que indican a quién ayudar para que el universo no sufra. Esta primera temporada ha servido de presentación. Cada semana Jake le mostraba a su padre algún número o algún patrón para que lo siguiera, y así Martin supiera a dónde ir y a quién ayudar. La relación era bastante curiosa y también el modo en el que unos eventos producían otros hasta que el universo, y consecuentemente el niño dejaran de sufrir.

 A lo largo de la temporada han ido apareciendo personajes, que sin saberlo han ayudado a Jake en su cruzada, como las dos japonesas, el bombero, o el caballero invisible. Todos ellos jugaron un papel importante en los últimos episodios cuando Jake más les necesitaba. A sí mismo, hemos aprendido más sobre Amelia, una niña con las mismas capacidades de Jake. Parece que la segunda temporada se basará en la búsqueda de la niña. Martin y Jake ayudarán a la madre de Amelia, interpretada por Maria Bello, a quién presentaron en los últimos episodios de la temporada.

Touch es una serie bien hecha y que merece una segunda temporada. El final ha dejado las cosas medio cerradas, medio abiertas, probablemente porque no sabían si renovarían. Aún así se ha insinuado un especie de trama conspiratoria que fastidia un poco la serie. Los servicios sociales no quieren cuidar de Jake, quieren quitárselo a Martin porque trabajan para una misteriosa y poderosa compañía que conoce las capacidades de Jake y, entendemos, quieren estudiarle y utilizarle para hacer el mal. Esperemos que no tiren por ahí y sí por lo que de momento ha funcionado, que son las conexiones humanas. Touch pone una sonrisa y te da esperanza. Puede que sea un poco inocente pero es lo que necesitamos en estos momentos.

Así que Programa Piloto se apunta a Touch y la seguiremos en sus próximas andaduras.