Ya que estamos en plena época de reboots, revisiones y segundas partes de todas aquellas series que significaron algo para nosotros en los 80-90, nos hemos permitido recoger una de nuestras parejas de la infancia: Cory Matthews y Topanga Lawrence.

La historia romántica de ‘Yo y el mundo’ nos gusta principalmente por dos razones: es el amor adolescente más intelectual  que hemos visto jamás en televisión – con permiso de ‘Dawson Crece’ – y a la vez se las apañaban para ser tiernos y divertidos. Por aquel entonces no existían ni SMS ni Tuenti, ni Facebook y los avances de Cory con la chica de sus sueños se comentaban en el recreo, entre mordisco y mordisco al bocadillo de nocilla (o de paté, si tu madre sufría un arranque nutricional).

Algunos de los guionistas detrás de Cory Matthews -el personaje de Ben Savage– fueron Michael Swerdlick y John Tracy. Puede que no te suenen, pero por culpa de ellos hemos seguido títulos como ‘Un médico precoz’, ‘Los problemas crecen’, ‘Cosas de casa’ o ‘Padres forzosos’. Sí, todo series ñoñas pero eran imprescindibles a la hora de la merienda. La manera que tenían nuestros dos protagonistas de tratar el uno con el otro seguía las reglas de estos guionistas al pie de la letra:  Ella era mucho más lista que él, era independiente, un poco respondona y bastante excéntrica… hasta en el nombre: Topanga – Danielle Fisher-  un nombre que proviene de los indígenas americanos y que significa “donde la montaña se encuentra con el mar”.

Pues eso, que la chica hacía yoga boca-abajo para centrarse antes de los exámenes mientras el pobre Cory la miraba arrebolado comentando la jugada con su amigo. ¡Eh, pero tranquilos! Esto es Disney y el buen chico consigue a la chica.  Mucho coqueteo, tartamudeos y angustias prepúberes después Cory comenzaba a salir con Topanga… para romper 11 capítulos después porque se habían convertido en unos viejos. No duraba mucho la separación.

Una vez ‘Yo y el mundo’ pasaba a la universidad, nuestros dos tortolitos  se prometían en matrimonio… para volver a romper poco después por esa manía que tienen los guionistas de no dejar que una pareja dure una temporada completa: Los padres de Topanga se divorcian y  a la muchacha le da un ataque de pánico cancelando la boda con alegatos de no creer en el amor incluidos. menos mal que en Disney siempre hay una madre dispuesta a explicar las cosas y lanzar un discurso sobre cómo hay que luchar por el amor ante todo porque merece la pena el riesgo. Y te subía el azúcar… pero todos respiramos aliviados porque Cory y Topanga debían estar juntos. Y no había más que hablar.

Ahora van a hacer una segunda parte de la serie- que en inglés se llamará ‘She meets world’- , y lo que más alegría nos dio es saber que, después de todos estos años, una de nuestras parejas favoritas de la infancia sigue junta… y siendo padres Disney es difícil que esto cambie.